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L' Atelier de Yoga

Monólogo de Segismundo

LA VIDA ES SUEÑO

Calderon de la Barca

Sueña el rey que es rey, y vive con este engaño mandando, disponiendo y gobernando; y este aplauso, que recibe prestado, en el viento escribe, y en cenizas le convierte la muerte, ¡desdicha fuerte! ¿Que hay quien intente reinar, viendo que ha de despertar en el sueño de la muerte? Sueña el rico en su riqueza, que más cuidados le ofrece; sueña el pobre que padece su miseria y su pobreza; sueña el que a medrar empieza, sueña el que afana y pretende, sueña el que agravia y ofende, y en el mundo, en conclusión, todos sueñan lo que son, aunque ninguno lo entiende. Yo sueño que estoy aquí destas prisiones cargado, y soñé que en otro estado más lisonjero me vi. ¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción, y el mayor bien es pequeño: que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son.

RAQUEL PRÁDANOS THOBOIS

Profesora independiente Yoga Iyengar

El Yoga IYENGAR debe su nombre al Maestro Yogacharya Sri B.K.S. Iyengar, (Bellur, Karnataka, 1918 – Pune, Maharashtra, 2014).

Su método de práctica pone el acento en la implicación de la mente y la inteligencia en la realización tanto de asanas como de pranayama o pratyahara. Se trata de aprender y cultivar la actitud de implicación total de la mente y la inteligencia en las posturas y los ejercicios respiratorios.

Esta actitud se desarrolla mediante la observación simultánea y constante de todos los movimientos y detalles técnicos que componen una postura o un ejercicio respiratorio, pero manteniendo al mismo tiempo la pasividad completa del cerebro y de sus órganos de expresión (fundamentalmente ojos y oídos), y el control de la respiración.

La intensidad de esta penetración mental en cada asana y pranayama es la característica principal del Yoga IYENGAR y la garantía de que se trata de un camino de transformación interior.

Para que esta implicación mental sea eficaz, será imprescindible también que el cuerpo esté a la altura de su cometido, como soporte indispensable de esa unión de cuerpo, mente, inteligencia y alma. Por eso está tan extendida la idea errónea de que el Yoga IYENGAR es un yoga físico, porque insiste también en los medios para lograr la fortaleza, flexibilidad y resistencia del vehículo que ha de llevarnos a las alturas espirituales.

- PATXI LIZARDI